Los progresos en el proyecto durante este tiempo han sido varios, resumiendo:
Por un lado se han construido los zunchos superiores de los
primeros tres edificios, e incluso del cuarto, el dormitorio de los chicos;
dando un empujón a este último, para que todos vayan terminándose al mismo
tiempo. Esta pieza, además de servir como atado perimetral, también hace las
veces de dintel, tanto de las puertas como de las ventanas. Es decir la
arquitectura se ha simplificado, uniendo estas dos piezas en una sola. Se
previó un espesor de zuncho igual al muro, para que éste último sirviera de encofrado
inferior. Al momento de hormigonar se introdujeron los espárragos y pletinas a
las que se soldarán las cerchas de la cubierta. Para evitar las grietas que nos
salieron en el zuncho inferior, causadas por el calor y el viento, esta vez se
ha utilizado un retardador de fraguado del hormigón. 
Por otro lado se han construido los muros que dan la
pendiente a la cubierta en los extremos (o
testeros). La construcción de los mismos es una opción más económica que
la colocación de una cercha más sobre cada uno de estos muros de borde. Éstos
aportan un nuevo aspecto a la arquitectura general del centro, más escultórica,
bajo mi punto de vista, debido a las puntas que sobresalen recortando la línea
del cielo.
Además en un taller de la ciudad se han confeccionado las
cerchas, grandes y pequeñas, para las cubiertas de los diferentes módulos. Para
ello se ha hecho un esfuerzo en los puntos de unión de los perfiles. No
solamente se han soldado los perfiles a una chapa intermedia, sino que los
perfiles se han soldado también entre sí, reforzando el resultado total de la
cercha. Igualmente se han comprado el resto de piezas metálicas de la cubierta
(correas y chapa), actualmente ya en obra, dispuestas a ser soldadas, pintadas
y colocadas, por el mismo equipo de soldadores de las cerchas. Esto cuando
consigamos arreglar definitivamente nuestro puesto de soldar autónomo.
Mientras tanto, para ganar algo de tiempo, se ha dado la
primera capa del enfoscado, se han limpiado los interiores de los edificios y
se han trazado las terrazas. Igualmente se han traído unos cuantos camiones de
arena, intentando adelantarnos a los bloqueos de caminos que las próximas lluvias
seguramente crearán. 
También se ha empezado la obra del quinto bloque, el almacén
de grano. En éste se ha ejecutado la cimentación, el zuncho inferior y se han empezado
los muros. La posición de este almacén queda entre los nuevos edificios del
centro de formación y los existentes en la granja de la asociación local, justo
al ladito de la cantera de bloques de laterita. Por lo que a medida que se van
fabricando los nuevos ladrillos, se van colocando en obra, recién terminados.
Y finalmente se ha trabajado sobre el plano definitivo de
las letrinas, de tipo ECOSAN, con diferentes técnicos conocedores y albañiles experimentados
de la tipología concreta. Esta obra se acaba de poner en marcha, con la
fabricación de los bloques de cemento que constituirán las fosas y los muros de
las cabinas superiores.
Por lo tanto hemos estado ocupados, aunque los resultados
aún no sean demasiado visibles. Se podrían contar muchos más detalles, otros
trabajillos en marcha y anécdotas del día a día, pero creo que por hoy ya vale.
La próxima más y mejor!
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